LA VERDAD OS HARA LIBRES.

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La vida es sorprenderte, curiosa, variopinta y llena de sorpresas agradables.
Nunca pensé que trabajaría en un proyecto para la formación de una Web provida. Me
he dejado guiar por el Espíritu, también por las personas del equipo que me han
corregido, he escuchado, he contribuido con mis opiniones. Todo ello me ha
proporcionado satisfacción y nuevas oportunidades para crecer de forma personal, es
una oportunidad estar dentro del grupo provida para la difusión de la moral cristiana
sobre la temática de la vida en las redes sociales.
La Web de “Apasionados por la Vida”, es el resultado de muchos meses de trabajo;
también de oración comunitaria por la causa de la vida y la defensa de la verdad.
Recuerdo que cuando se dieron los primeros pasos en este proyecto, no imaginé que
llegaríamos a construir una Web oportuna, atractiva y amena; es el resultado agradecido
del orden y la lógica de las múltiples posibilidades que nos proporcionan las modernas
tecnologías y grafologías de internet.
Después de ver acabada la web, he tenido un sentimiento de satisfacción, y de sana
alegría, porque veo que es una herramienta útil y actual, al servicio de todos los provida,
y de forma especial para aquellos que no tienen voz, los no nacidos, los enfermos, los
ancianos, los descartados. Es muy duro decir, los ” sin voz”, pero lamentablemente es
una realidad que hay que desvelar si se quiere hacer justicia.
No son pocos los casos, que delante de un embarazo inesperado, o un anciano enfermo
y quejoso, surja de forma inmediata o casi automática, la idea de acabar con el problema
de una vez por todas, se piensa en el aborto o la eutanasia respectivamente, porque esas
situaciones frenan sus vidas, e intereses, sus actividades personales, o las diferentes
diversiones sociales en el fin de semana. Por ello, sabemos de casos que son inducidos
o presionados a tomar decisiones que no son las del afectado, sino que son opiniones
abocadas por segundas personas con intereses oscuros, y en algunos casos con ciertos
intereses económicos.
Como consecuencia de ello, ha nacido una nueva cultura de la muerte, su características
son diversas: a) la impiedad para los no productivos, b) la manipulación, hasta
conseguir en el anciano la creencia que es un estorbo, c) que su misión en esta vida
ya ha acabado etc.

Nuestra razonamiento puede sorprender puesto que, muestra una cultura en favor del
amor al prójimo, busca: en la ciencia, en la medicina, en la moral etc…, las fuentes de
su justificación por el buen servicio al ser humano, justificando el respeto a la vida,
desde el momento de la concepción hasta su muerte natural de forma ininterrumpida.
Se observa que en la medida que se pretenden arreglar situaciones complejas a través de
leyes inmorales, como la ley de eutanasia o aborto, nos alejamos del amor verdadero y
desinteresado hacia el prójimo. Además, cuando se utilizan esas leyes, no se fomenta
una cultura de cuidados paliativos adecuados; por lo tanto se elige no el mejor camino
para el necesitado, sino el camino barato para el sistema sanitario, una inyección letal
que no acaba con la enfermedad, sino que acaba con la vida, se deduce que no hemos
solucionado el problema sino que hemos acabado con la vida.
La libertad es uno de los dones más preciados en la vida, pero la libertad no puede
subsistir de forma aislada sin la verdad; libertad y verdad siempre van cogidas de la
mano para que el resultado final pueda ser veraz.

Las conciencias se forman bien cuando son educadas en la verdad, con ella se puede
ejercer un alto grado de libertad, fuera de esta relación surgen otras cosas como el
desprecio al prójimo. Cuando la conciencia se forja en el egoísmo, en los propios
intereses, el materialismo práctico etc., entonces, es cuando vamos mal, aparecen leyes
que no sirven ni aman al prójimo, aparecen las nuevas dictaduras, el pensamiento único
dirigido, que buscan acabar radicalmente con los más vulnerables, aunque su apariencia
sea de compasión.


Saludos.
Diego Balsera Rodríguez

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